Colección de Minerales de Mmarte: Crónica de la X Feria de Minerales de Arrigorriaga

Ayer, con permiso de la familia, pude escaparme un par de horas (de 11 a 13) a la feria de minerales de Arrigorriaga que nos da un respiro por estos lares hasta las próximas ediciones de Fosminer en octubre y Urretxu en noviembre.

A pesar del pequeño tamaño de la feria, mereció la pena la visita ya que estaba perfectamente organizada. Hubo un ambiente tranquilo y familiar aunque quizá un poco fresco por que día que hizo.

En cuanto a los expositores, prácticamente estuvieron los habituales con más o menos el material de siempre, aunque destacaría algunos puestos.

Pedro y Miguel tenían muy buenas piezas de rosasita, auricalcita, hemimorfita y plattnerita de Lanestosa. Me regalaron alguna muestra, aunque ya las tenía de Javier, que precisamente les había llevado unas semanas antes a la mina. Yo no pude ir con ellos. También me regalaron xilópalo de Burgos.

Vista general de la feria a primera hora

Peluco tenía unas goethitas muy bonitas de la zona de La Arboleda recogidas recientemente por él mismo. No pude resistir la tentación y le cogí la mejor de las que le quedaban.

Forcada tenía geodas de celestina de Treviño, muchos cuarzos de Las Carreras, calcitas cántabras, algunas muy interesantes. No podía falta la malaquita de Arrigorriaga, claro.

Paco tenía muchos y variados cuarzos de Vizcaya.

Pero para mi el puesto estrella fue el de Manolo, al que conocí en la feria de Amurrio y que es donde pasé más tiempo con mi amigo Gerardo. Manolo llevó varios cuarzos riojanos de su colección para animar la feria, el más impresionante sin duda el enorme cuarzo de Cornago. También cuarzos riojanos de otras zonas, además de piezas antiguas asturianas, cántabras, riojanas, andaluzas, etc. El haber estado varios años descolgado de las ferias le permite sacar material que hacía años no se veía. Yo le cogí una pieza muy curiosa de Áliva, un buena bola de Tubilla del Agua y varios cuarzos entre los que destacan los de Cornago.

Gran parte del tiempo estuvimos disfrutando de las interminables anécdotas de Manolo, que por su trabajo pudo recorrer gran parte de la geografía española en los 70 y 80 y conocer yacimientos y gente en la época buena cuando podías comprar por 8000 pesetas un hórreo entero de fluoritas de Berbes.

Después, di un paseo rápido para ver el resto de los puestos y despedirme de la gente hasta la próxima feria.

Espero que las fotos sirvan para transmitir mejor lo que se vio y que otro año sea mayor la afluencia de coleccionistas.