28 de octubre de 2019

Fui a por piedras, volví con piedras y castañas

A veces cuando uno va de minas tiene la suerte de encontrar moras, nueces, setas y castañas que compensan con holgura la excursión. Por eso, y por la buena temperatura (ni el calor del verano ni el frío de la primavera), al menos aquí en el norte el otoño suele ser una época como ninguna para hacer montaña e ir de minas.

Ayer tuve la suerte de descubrir un nuevo yacimiento mientras recogía una buena cesta de castañas. Costaron su esfuerzo por las pendientes que tuve que superar, pero mereció la pena.



Calcita diente de perro, Vizcaya

No hay comentarios:

Publicar un comentario