22 de diciembre de 2008

Plata Nativa del pozo Nº 2, mina Balcoll, Falset (Tarragona)

Excelentes ejemplares de Plata Nativa cristalizada de primera generación, los cristales están agrupados en agregados muy brillantes sobre matriz de Dolomita y Ankerita. Procede del pozo número dos de la mina Balcoll de Falset en Tarragona.



Gracias al interés y la afición de Joan Abella he tenido la posibilidad de adquirir ésta y otras fantásticas piezas a un precio muy asequible. Sin duda, para goce y deleite de coleccionistas como yo, Joan está sacando a la luz algunas de las mejores piezas de plata nativa nacionales de los últimos tiempos.

Os recomiendo echar un vistazo al blog de Joan Abella y si tenéis la posiblidad, haceos con un ejemplar de su libro (Minerals i mines de la conca de Bellmunt del Priorat):
http://www.mineralsabella.blogspot.com/

Trueba: El transporte de mineral de hierro por el litoral cantábrico

El martes 23 de diciembre se presenta el número 1 de la revista Trueba (http://www.trueba.org/) en el centro cultural Meatzari de Muskiz.

Aparentemente, la revista va a tener una temática variada sobre las localidades del entorno, pero por la historia de estos pueblos seguro que disfrutaremos de multitud de artículos mineros.

¡Suerte y enhorabuena!

16 de diciembre de 2008

Carta a los Reyes Magos

En estas fechas tan entrañables quien más quien menos desea que le regalen algún detalle especial: Unos zapatos, ropa, colonia, una bufanda, un pico, una lupa..., por pedir que no quede.

¿Y una piedra? Lo cierto es que no queda nada bien contarle a tus amigos que te han regalado una piedra, ¿verdad?. Por mucho que les digas que son cristales muy buenos, de intenso color, brillo y tamaño, van a pensar que estás un poco mal de la cabeza por preferir una piedra a la Wii Fit o similares.

He de reconocer que la primera vez que oí que un coleccionista le regalaba a otro un buen mineral por Navidad me sorprendió bastante. Pero bien pensado, ¿qué mejor detalle para nuestra colección que una pieza con sabor navideño?

"Queridos Reyes Magos de Oriente. Este año he sido muy bueno y por eso, aprovechando que Marruecos os pilla de paso, me gustaría que me trajerais una vanadinita, azurita...." (No perdáis tiempo y empezad a escribir vuestra carta ;-)

Os deseo un provechoso 2009 lleno de excursiones, intercambios, nuevas y buenísimas piezas, y muy buenos momentos con los compañeros y amigos de fatigas y de piedras.

¡Felices Fiestas!

12 de diciembre de 2008

Fluorita de Berbes (Asturias)


Los coleccionistas del norte somos unos privilegiados al tener tan cerca un oasis minero como Berbes. Nadie duda que de ahí han salido fluoritas, cuarzos y baritas espectaculares a nivel mundial y, lo mejor de todo, aún siguen saliendo. ¡Hombre!, es cierto que no es llegar y besar el santo, pero con algo de insistencia y pasión se pueden encontrar cristales muy curiosos y algún biterminado tirado por el suelo.

Yo nunca me he topado con una geoda de esas espectaculares que encuentra la gente (cosa complicada con mis muy limitadas herramientas: cincel, maza y brazo), pero los cristalitos que me he llevado a casa y las vistas de la Paredona, El Cueto del Aspa y El Frondil todo lleno de fluorita son más que suficientes para mi. De todas formas, como se suele decir, haberlas haylas: una compañera de trabajo que paseaba en agosto por la playa de La Vega cercana al yacimiento se encontró un cuarzo de los de Berbes de 10 cm.

Y lo mejor, siempre que he visitado la zona me he encontrado con aficionados de Madrid, Cantabria, Asturias, etc, con los que he disfrutado momentos muy agradables. No sería mala idea que un día se organizara allí un encuentro, mesa de intercambio, feria, o simplemente comida de hermandad entre los aficionados a las piedras.

11 de diciembre de 2008

La incompetencia de la administración hospitalaria

Todo el mundo sabe lo importante que es la formación continuada en cualquier profesión. Muchas veces, y cada día más, es la única manera que tenemos de garantizarnos una carrera profesional competitiva dentro de la Unión Europea. ¡Ay, qué lugar ese donde la formación se incentiva y valora!

En el hospital donde trabajo, y supongo que así será en los demás, la única manera que tienes de recibir esta formación continuada surge de una autofinanciación desinteresada, por nadie agradecida y muy poco valorada. Eso sí, para realizar el curso te conceden unos magníficos días de permiso que, afortunadamente, no tienen que salir de tus vacaciones (aunque con el tiempo me puedo esperar cualquier cosa de la incompetencia).

Normalmente, y por desgracia en mi especialidad, la mayoría de estos cursos son en el centro y sur de la Península Ibérica, y trabajando en el norte uno puede imaginar que entre 8 y 12 horas de viaje no te las quita nadie (y si es en transporte público algo más). Como los cursos suelen empezar a primera hora de la mañana, lo lógico es emplear el día anterior para realizar el viaje. Pues bien, como la norma hospitalaria sesuda dice que en los cursos realizados en territorio nacional no se conceden permisos para realizar los desplazamientos de ida y vuelta, resulta que, salvo que te teletransportes, ese día de viaje te lo restan de tus vacaciones.

¿Qué implica esto? Muy fácil y absurdo. Si voy a un curso, digamos de Valdecilla (Santander) a la muga (frontera) con Francia que me puede llevar 3 horas, me conceden todo un día de permiso para mi disfrute y relajo viajero. Pero como se te ocurra hacer un curso en Baeza (Jaén) date por jodido. No sólo tienes unas 14 horas de viaje en tren (medio muy recomendable para viajar en invierno), si no que además tienes que despojarte de un día de tus vacaciones para hacerlo.

Así que una persona comprometida con su Sociedad honestamente decide reciclarse y hacer un curso, digamos en Salamanca, para aprender nuevas técnicas que ayuden mejorar el tratamiento a los pacientes oncológicos. Eso te cuesta (viaje, matrícula y estancia) unos 600 EUR de los que 420 salen íntegramente de tu bolsillo más dos días de tus vacaciones para viajar (uno de ida y otro de vuelta).

Para que luego digan que los jóvenes residentes no aportan nada a sus hospitales y que sólo reciben formación y todo tipo de recursos de éstos. Seguro que esto no ocurre en Europa.

Afortunadamente, siempre nos quedará la satisfacción de un trabajo bien hecho y lo más valioso de todo: El agradecimiento del paciente que aparentemente lo tiene todo perdido y que gracias a ti puede ver una luz de esperanza.

5 de diciembre de 2008

El injusto precio de los minerales


Nadie pone en duda que el modo más satisfactorio de ampliar una colección de minerales es mediante la recogida personal de las piezas. Con ello se conocen, además del yacimiento, la gastronomía, la arquitectura y las gentes del entorno, cosas muchas veces más enriquecedoras que el propio yacimiento. Y no hablemos de la multitud de anécdotas e historias que surgen de estos viajes.

Otro modo quizás no tan satisfactorio pero igual de enriquecedor consiste en aprovechar los viajes que realizamos por diversos motivos (trabajo, ferias, familia, vacaciones, etc) para hacer intercambios con otros coleccionistas. Algunas veces es la única manera de obtener material antiguo o raro, y con la excusa conoces a la gente de otras zonas, intercambias experiencias e incluso se acaban organizando excursiones a yacimientos interesantes.

Muchos coleccionistas son reacios al intercambio porque consideran que no van a recibir la calidad de las piezas que ofrecen, un tema polémico el de la valoración que hacemos de nuestras propias piezas frente a las de los demás que mejor dejamos para otra ocasión.

Y, finalmente, existe la opción de la compra de minerales en tiendas, ferias, Internet, etc. Algunos coleccionistas no aceptan este modo de conseguir nuevos minerales y me parece una actitud de lo más respetable y coherente. Sin embargo, otros muchos no tenemos ni el tiempo ni los contactos ni los recursos ni la posibilidad de viajar y nos parece más práctico y rentable comprar la pieza.

Vemos una bonita celestina andaluza, por ejemplo, con un tamaño ideal y un brillo espectacular y nos preguntamos: ¿Cuánto cuesta? ¿Cuánto estamos dispuestos a pagar? ¿Cuál es el precio justo?

Una de las cosas que más llama la atención a la gente ajena a este mundo es que las preguntas anteriores no sólo no tienen una respuesta común sino que la discrepancia a veces es brutal. No hay más que pasearse unos minutos por Internet para encontrar diferencias de un orden de magnitud en piezas de características similares. Y, claro, no es lo mismo pagar 25 EUR que 250 EUR, ¿verdad? Eso sin hablar de que muchas veces puedes conseguir mejor material mediante intercambio. Si sabemos que el yacimiento está cerrado, protegido o es muy antiguo seguramente nos parezca justo un precio alto independientemente de que podamos pagarlo, ¿no? Pero, ¿cuál es el precio justo de un mineral? ¿Existe uno o no?

En mi opinión no existe uno sino varios posibles y creo que los debe definir uno en cada momento particular empleando la intuición y la experiencia. Yo, en particular, algunas veces estimo el precio de una pieza cara a partir del coste total (viaje, alojamiento, etc) que tendría para mi la recogida del espécimen en el hipotético caso de que aún fuera posible hacerlo. Aunque sé que este cálculo sobrestima el precio en muchos casos, al menos a mi me sirve para justificar moralmente el dinero que gasto en piedras.

3 de diciembre de 2008

Cuarzo biterminado de Salamanca


La semana pasada tuve el placer de visitar Salamanca por motivos de trabajo. Una ciudad magnífica que merece una visita en cualquier época del año, pero quizás más en ésta en la que el frío (padecí -9 ºC) y la nieve le dan un toque especial.

Las cañas y las tapas son obligatorias y magníficas en cualquier bar de la ciudad, aunque el Cervantes, Casa Vallejo y Casa Paca no os pueden faltar en el recorrido. Y si, además, sois coleccionistas de minerales no podéis dejar de ir a ver a Andrés que tiene una tienda de artículos de regalo en la calle Rúa Mayor. Ésta se reconoce fácilmente porque en el escaparate hay algunos minerales de adorno.

Andrés tiene muy buen material nacional y de su región (tanto minerales como fósiles) para intercambio, buena conversación, anécdotas interesantísimas y tiempo para enseñarte los mejores locales de tapas de la ciudad.

En la foto un grupo de cuarzos biterminados de unos 5 cm recogido por él mismo recientemente en el Embalse de Almendra.