No siendo Fosminer una Feria que promueva el intercambio siempre me gusta llevar alguna piecilla por si suena la flauta, que no suele ser muy a menudo. Y ello a pesar de que llegarse allí en metro con un par de cajas llenas de piedros no es nada cómodo.
Este año llevaré poca cosa y pequeña aunque con cierta estética porque pretendo conseguir a cambio (if possible) también algo de estética, como el año pasado.
Algunas calcitas de Camargo, hemimorfita azul de Arcentales, algo de la mina Primitiva y los azufres (no me ha dado tiempo a limpiar los demás) de Laredo que aparecen en la entrada.
Ya veremos si da frutos la feria tanto en la modalidad de compra como en la de intercambio.
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